Santo Domingo Este.– Las consecuencias de la tormenta Franklin han dejado una estampa desoladora en el sector Cancino Adentro, donde numerosas viviendas han sido invadidas por las aguas.
Los habitantes de esta zona se enfrentan a la angustiante tarea de rescatar sus pertenencias mientras las calles se convierten en ríos temporales.
La escena no es desconocida para los residentes de la calle Respaldo Quinta. Cada vez que el cielo se oscurece y las primeras gotas caen, se activa una carrera contra el tiempo para sacar el agua que amenaza con inundar sus hogares.
La falta de mantenimiento de los sistemas de drenaje ha llevado a que las aguas de gran parte del sector converjan en este punto crítico, generando acumulaciones que atrapan a las personas en sus propias casas.
La construcción de muros defensivos en los frentes de las viviendas se ha vuelto una necesidad imperante para evitar la penetración del agua. Sin embargo, en ocasiones la magnitud de la inundación es tal que estas barreras resultan insuficientes.
Los relatos de los afectados revelan que cualquier llovizna puede convertirse en una pesadilla, inundando calles y hogares por igual.
La desesperación se ha convertido en el compañero constante de estos residentes, que claman por una solución. «Nos hemos acostumbrado a ver cómo nuestras casas se llenan de agua hasta varios metros con cada lluvia.
Promesas de solución han sido hechas por el alcalde, pero hasta ahora, solo son palabras», expresó Juanito López, uno de los afectados.
Las madrugadas se han vuelto un tiempo de lucha y sacrificio para los habitantes de Cancino Adentro. El constante sonido de bombas de agua y el trabajo incansable para mantener sus hogares a salvo ha interrumpido su descanso.
Mientras tanto, la comunidad espera que las autoridades cumplan con sus compromisos y resuelvan esta problemática que afecta su calidad de vida de manera constante.